Aprende a restablecer el equilibrio y la armonía gracias a Roser Cabré: Diplomada en educación. Máster Trainer en PNL (Programación Neuro Lingüística); maestra de Reiki. Especialista en Terapia Regresiva (sistema Weiss, Cabouli y Anatheóresis). Terapeuta en interpretación de sueños y Técnicas de Cambio. Conductora de Talleres de Crecimiento Personal..

¿Qué es el Reiki?

Reiki es una voz japonesa que significa Energía Vital Universal.
Reiki es una forma de terapia que pertenece al renglón de las llamadas terapias complementarias, naturales o alternativas en donde el principal objetivo es la sanación física, emocional, mental y espiritual, así como el restablecimiento de la armonía del ser con su yo ecológico y el equilibrio sano. Esto se logra por medio de la imposición de manos.
El Reiki restablece el equilibrio y la armonía en uno mismo, interna y externamente, lo cual revierte muy positivamente en el entorno y la salud de cada cual.

¿Qué se aprende en los Cursos de Reiki?

Reiki es un método muy sencillo que se aprende fácilmente. Una vez se ha integrado bien mediante una práctica adecuada y continuada, pasa a formar parte de la propia naturaleza del Ser, convirtiéndose en una manera de vivir, en una manera de ver las cosas, de funcionar, de sentir, de pensar… A partir de ahí, los beneficios del Reiki empiezan a multiplicarse pudiendo funcionar a todos niveles: mental, emocional, físico, espiritual… Lo mejor y más interesante de la aplicación del Reiki en la vida cotidiana es poder canalizar la Energía Vital Universal para múltiples y variados objetivos.
A lo largo de los tres niveles, se aprende a canalizar la energía universal para transmitirla tanto a uno mismo y a los demás seres (minerales, plantas, animales, personas…), como a los espacios, viviendas u objetos (protección, limpieza, energización, purificación…), o a la consecución de metas y objetivos, entre otras cosas.
Mediante la canalización y transmisión de la energía, Reiki es una técnica que puede utilizarse para reequilibrar, purificar, relajar, liberar toxinas, aumentar la energía vital y las defensas, aumentar los niveles de bienestar, etc

Beneficios y aplicaciones del Reiki

Estos son algunos de los muchos beneficios que el Reiki nos puede aportar:

  • Actúa a todo nivel: físico, mental, emocional y espiritual.
  • Favorece la autocuración porque libera la propia energía curativa.
  • Fortalece la mente, el cuerpo y el espíritu.
  • Equilibra la frecuencia vibratoria del cuerpo y de la mente.
  • Produce relajación profunda.
  • Libera bloqueos y purifica toxinas.
  • Equilibra los centros energéticos (chacras).
  • Restablece la armonía y fluye en cantidad ilimitada.
  • Ayuda al crecimiento personal y espiritual.
  • Aporta beneficios mentales y hace sentirse más contento con la vida.
  • Da más confianza en uno mismo y potencia la autoestima.
  • Desarrolla el propio potencial humano y espiritual.
  • Potencia los propios recursos y el triunfo.
  • Combate el estrés.
  • Aporta más facilidad para superar las crisis.
  • Ayuda a encontrarse a uno mismo.
  • Eleva al ser a la Comprensión.

Sus aplicaciones son infinitas:

  • Personas, animales, plantas.
  • Alimentos, productos de belleza, medicinas, objetos inanimados.
  • Limpieza de casas, estancias, objetos.
  • Protecciones (casa, coche, personas, mascotas…)
  • Carga de piedras, cristales, amuletos…
  • Agilización de trámites.
  • Casos de urgencia, accidentes, enfermedades, operaciones, dolencias…
  • Tratamientos de estética, masajes…
  • Embarazo y recién nacidos.
  • Asistencia a la muerte.
  • Búsqueda de trabajo, casa, pareja…
  • Mejora en las relaciones, economía…
  • Vida sexual y de pareja.
  • Eliminación de hábitos nocivos.
  • Modificación de actitudes y comportamientos.

Todo ello queda bien aclarado y resuelto en los cursos, además de otras muchas cuestiones de interés que pueden interferir en la comprensión de lo que significa realmente este método ancestral que tantos beneficios aporta a la vida de sus usuarios.

¿Quién puede realizar Reiki?

El Reiki fluye básicamente a través de las manos, aunque podemos transmitirlo también con el aliento, la mirada, etc. Ello es algo que se aprende y todos tenemos esa capacidad innata para poder desarrollarla. De ahí que Reiki, más que aprenderse, se re-aprende o se recuerda. No se trata, pues, de un privilegio de una minoría. Es un método fácil y sencillo de aprender, asequible a todos, sin necesidad de requisitos o conocimientos previos. Ni siquiera hace falta que uno se dedique a las terapias para aprender Reiki, es más, aconsejo que a título personal se aprenda esta maravillosa técnica por los enormes beneficios que aporta.

¿Qué tipo de personas solicitan más el Reiki?

Podríamos diferenciar dos grupos de usuarios Reiki: aquellos que lo solicitan a nivel terapéutico y aquellos que desean integrar esta técnica para la auto aplicación además de la aplicación a otros. Este segundo grupo es el que se siente motivado para realizar los Cursos de Formación.

Entre las personas que he tratado con Reiki como herramienta terapéutica, está el caso de una joven mujer recién operada de cáncer de pecho que solicitó mis servicios para disminuir los efectos de la quimioterapia. Durante todo el tratamiento, realizamos cuatro sesiones seguidas en días consecutivos cada vez que le era aplicada una quimio y seguimos con una sesión semanal hasta la siguiente inyección de tal sustancia.

La primera vez que le apliqué Reiki habían pasado diez días desde su primera sesión de quimio y, según los comentarios de los profesionales, su cuerpo debería haberla ya expulsado desde el tercer o cuarto día a partir de que ésta le fuera inyectada, por lo que se suponía que se encontraba limpio. Al poco rato de estar transmitiéndole energía en zonas estratégicas, empecé a oler algo extraño que mi olfato no supo identificar, por lo que no hice ningún comentario; era un olor fuerte, como a una especie de desinfectante. Al día siguiente, cuando regresó para la segunda sesión, me comentó que el día anterior, sorprendentemente, al llegar a su casa e ir al baño empezó a expulsar quimio. Me dijo: “Lo supe por el olor fuerte y característico” que, coincidió, era parecido a un desinfectante. Ello corroboró la idea de que el Reiki ayuda a expulsar las toxinas y limpiar el cuerpo de sustancias extrañas.

Los días que siguieron, y hasta el final del proceso, estuvieron llenos de gratas sorpresas, muy especialmente para el personal sanitario que no podía dar crédito al buen estado de salud del que daba muestras aquella mujer muy a pesar del tratamiento que le estaban suministrando y en comparación con otras personas que al igual que ella lo estaban recibiendo. En ningún momento perdió el color; se mantuvo con muy buenos niveles de energía y animosidad; los efectos secundarios se redujeron a la mínima expresión, incluso algunos ni siquiera aparecieron; y el pelo le empezó a crecer antes de lo previsto, entre otros muchos beneficios.

El antes y el después de iniciarse en la práctica del Reiki

A lo largo de los cursos que he impartido, he podido observar en los alumnos infinidad de cambios muy beneficiosos: mayor confianza en uno mismo; reducción de miedos; resolución de dolores y problemas de salud; aumento de la autoestima; más seguridad, especialmente en la toma de decisiones; aumento de la intuición y las facultades mentales; más tranquilidad y serenidad ante situaciones discordantes; mayor fuerza interior; más positividad y control; y un largo etcétera… que, evidentemente, llena de bendiciones el día a día y la historia de cada cual.

Efectividad del Curso

Reiki se divide en tres niveles básicos cuyas enseñanzas son progresivas y complementarias.

El principal objetivo del primer nivel es aprender la técnica básica de canalización de la energía para aplicarla en infinidad de campos y variedad de seres, espacios u objetos. Se aprenden los protocolos básicos para realizar auto sanación, sanación a otros, tratamientos rápidos, equilibrado de chakras, energización de objetos y otras técnicas sencillas y fáciles de aplicar que, por tratarse de un primer nivel, van dirigidas específicamente al cuerpo físico.

El segundo nivel, en cambio, va dirigido al tratamiento y equilibrado de los cuerpos mental y emocional, básicamente. Se trabaja con el soporte de unos símbolos para potenciar y amplificar la energía y se aprende a mandar Reiki a distancia y a energizar metas y objetivos entre otras cosas.

El tercer nivel está enfocado en el centramiento, equilibrado y sanación del cuerpo espiritual. Se trabaja con potente simbología con el fin de potenciar los trabajos y sanaciones, a la vez que se aprenden técnicas más potentes para optimizar los resultados.

La Maestría la realizan tanto aquellos que desean transmitir este Conocimiento como aquellos cuyo objetivo es tanto el de ampliar, afianzar y reforzar la técnica como el de potenciar el crecimiento personal y espiritual.

Reiki supone un gran soporte para el crecimiento personal, así como una eficaz herramienta para realizar cambios muy beneficiosos a todo nivel, todos ellos enfocados a la mejora de la salud en todos sus campos y, por tanto, a la mejora de la calidad de vida en general. Hay un antes y un después de los cursos de Reiki: uno se convierte en una persona distinta, más fuerte emocionalmente, con más seguridad y autoestima, con más serenidad, claridad y decisión para afrontar los cambios, y con más integridad y capacidad para generar por sí mismo la felicidad que tanto anhelamos.

Si quieres más información sobre nuestro centro y de los servicios que ofrecemos entra en el siguiente enlace:

Centro Terapéutico Nathanael